La prensa de hace unos años, traía las famosas “inocentadas”
en forma de noticias casi imposibles de creer, pero el 28 de diciembre.
Parecían verdad, aunque todo el mundo sabía cuál o cuáles eran falsas. Ahora no
se suelen hacer, y parece que los únicos que practican las “inocentadas” son
nuestros políticos. Este año se han adelantado bastante a la fecha acostumbrada.
Les pongo un ejemplo, a ver si están o no de acuerdo conmigo... Los dirigentes
del PP, todos, desde Mariano Rajoy hasta María Dolores de Cospedal, pasando por
Soraya Sáez de Santamaría, Carlos Floriano, etc., vienen repitiendo hasta la
saciedad que la crisis se ha acabado y que ya es historia. De golpe y porrazo,
hemos pasado a ser el “motor de Europa” y un ejemplo a seguir por el resto de
los países europeos, incluida Alemania y Francia, ante el evidente cambio de
tendencia de la economía española. Su optimismo no lo acabamos de creer
totalmente, teniendo en cuenta lo que vemos a nuestro alrededor.
Por citar algunas frases de los últimos días, está la de la
Secretaria General del PP, María Dolores de Cospedal, que aseguraba el 20 de
diciembre que estas Navidades iban a ser las mejores en términos de consumo y
empleo de los últimos 7 años, añadiendo que el 2015 será el año “de la bajada
del paro, del crecimiento del empleo y de la política social”. Por su parte la
Ministra de Empleo, Fátima Báñez, afirmaba que “España es hoy uno de los
motores den Europa y un ejemplo a seguir”, insistiendo sin ruborizarse que por
primera vez en 3 años hay motivos para estar más satisfechos, aunque quede
mucho por hacer.”España hoy crea empleo de calidad en todas las provincias y
sectores”. Se trata de una idea adelantada ya por el Presidente del Gobierno,
Mariano Rajoy , palabras reiteradas en las últimas horas.
Ante este “mantra”, repetido hasta el hartazgo, la gente se
lo toma a chota, escuchándose una carcajada general en los sectores sociales
que están sufriendo con más repercusión los efectos de la crisis. “Esta gente
se ha adelantado--dicen con sorna-- al Día de los Inocentes. Es una inocentada
más”. En efecto, estos políticos y los empresarios que ven la repercusión
económica en sus bolsillos, que se acerquen a la gente que lo está pasando mal,
y que sufre lo indecible para llegar a finales de mes con lo que ganan. ¿Qué
pensarán nuestros 300.000 desempleados de Canarias o el 18 % de los
trabajadores que según Cáritas Diocesana viven por debajo del umbral de la
pobreza, precisamente por sus bajos salarios?. ¿Qué dirán los que este año de
2014 no cobraron la PCI por que el Gobierno Canario, por ejemplo, se mostró
poco generoso en los presupuestos sociales? ¿Qué estarán pensando los parados que
no tuvieron cursos de formación por que el Ejecutivo redujo a cero el
presupuesto del Plan Integral de Empleo?.
Lo del anuncio de la recuperación económica predicado por el
Gobierno y empresarios será una inocentada más... No entendemos la inquietud
del Presidente de la Casa de Galicia, nuestro querido amigo Ricardo Villares
quien se las ve y se les desea para poder recoger los alimentos, ropa y
juguetes para tanto pobre que hay en la provincia de Las Palmas. Frente a esos
muchos optimistas del Gobierno y clase empresarial se anuncia la subida de
hasta 3 euros el actual Salario mínimo interprofesional con lo que esos
“desgraciados esclavos” del siglo XXI cobrarán 648 euros/mes. Esta “raquítica”
subida se fundamenta en el ruego que ha hecho el Banco de España de que la
mejora de los sueldos dañará la tan cacareada recuperación económica... Esta
institución bancaria pide mantener la moderación salarial para no entorpecer esa
mejoría de la economía que solo perciben los grandes de este país.
Ante este panorama, ¿ a quien creemos? ¿Al gobierno, a los
empresarios, al Banco de España o a los informes de Foessa, dados a conocer por
Cáritas Española? ¿Nos haremos los ciegos cuando nos tropecemos por nuestras
calles a los pobres de solemnidad que abarrotan los comedores de las ONGs?...
Las inocentadas se han adelantado este año en España. ¿Será otra inocentada el
fallo del Tribunal Supremo que ha echado por tierra uno de los elementos
centrales de la Reforma Laboral del Gobierno de Rajoy? A este paso, ya no
sabemos qué pensar...
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Por Sebastián Sarmiento Domínguez
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